15 junio 2009
El correo tradicional siempre me ha producido una emoción pasmosa. Me encanta recibir cartas a mano y pensar que han estado en algún remoto buzón amarillo antes, imaginar cuánto amor ha derrochado el remitente en cada una de las líneas, por la de sitios que habrá pasado y en todo el proceso desde la idea hasta que llega a mis manos y puedo romper el sobre como una salvaje. Cada carta es diferente y conservo todas desde los ocho años, cuando Isa se fue a vivir a Nicaragua (esto merece una historia aparte). Eran mi primer "algo" solamente mío, la intimidad en tinta, algo simbólico. Después vinieron las cartas a desconocidos de EP, las cartas de amor y desamor, las cartas para no hablar a la cara y también las cartas formalmente burocráticas... hasta que un día el boom de internet y el maldito vicio por "lo instantáneo" hicieron que dejara de recibir palabras bonitas en papel y me limitara a los christmas navideños, a la propaganda política y a los rutinarios membretes de BBVA y Orange. Lo confieso: sigo cogiendo aire antes de abrir el buzón esperando una respuesta, o mejor, un paquete grande y arrugado, con sobre color cartón, de alguien a quien no espero. Lo sé, debería aplicarme el cuento y hacerlo yo también más a menudo, además, me impacienta y me ilusiona a partes iguales esperar que llegue mi carta. Por eso, el otro día fui a Correos, tan emocionada por una cosa cotidiana que no tuve otro remedio que confesárselo a mi madre. Y, como siempre, entré en el círculo donde digo lo que me pasa por la cabeza sin filtro alguno, hago una madeja de ideas que me conducen una a la otra y no puedo dejar de hablar...Así fue que recordé un cuento que leía de pequeña. El protagonista era un cartero que sabía el contenido de las cartas solo con olerlas, creo que se llamaba Moritz y creo que hubiera sido mi vocación la de repartir cartas si no fuera porque ni los carteros van ya en bicicleta, ni las básculas son pesos de plomo, ni las oficinas son lo que eran...ni siquiera merece la pena esperar una sonrisa en el destinatario sin saber cuando pasará. Parece que estén dispuestos a romper toda la magia o eso pensé cuando leí un "Correos te notifica la fecha de recepción del envío desde el primer día".
25 abril 2009
Hace siete días (siete ya!!) que comenzó la locura más bonita de mi vida, más que bonita, un sueño...tanto, que me he dado cuenta qe a veces las palabras no son suficientes para recoger uno por uno los millones de instantes en los que se fragmentaron los 4260 minutos qe han supuesto esta aventura maravillosa. No sólo esos, también la semana de nervios y expectativas que fuimos creando con ilusión, a fuego lento, sólo para disfrutar de eso que habíamos imaginado tantas veces. También después, ahora, aún, tengo ganas de llorar de la emoción, de correr por la playa detrás de esas palomas gordas qe casi eran gaviotas, de que se nos quite el hambre y el sueño de pura felicidad y darnos cuenta, horas después, que lo estamos viviendo, aunque no lo parezca, estamos allí.
Seis de la mañana y la calle Larios en su sitio pero completamente vacía. Para algunos una postal imposible de ver; para nuestro cartero, algo habitual a esas horas de la mañana; para nosotras, cargadas de todo y de nada, algo que alteraba inevitablemente nuestro sistema nervioso después de un viaje infinito. Andamos sin rumbo desde la Plaza de la Constitución hasta Mariblanca, un aperitivo a lo que vendría después. Las gafas, la lluvia y no lluvia, las cámaras, Olivia, las calles y las plazas, las prisas, la música, el coche, la magia, Patio 19, la risa, la playa, Dieta, los bares, las maletas, el cine, los encuentros y desencuentros, la alfombra roja...pensaba continuamente en el regalo de estar allí, en cómo agradecerlo y a qién, en grabar minuciosamente cada detalle en nuestras cabezas y nuestras cámaras para poderlo recordar siempre, pero a la vez lo viví inevitablemente, sin pensar, porque no podía hacer otra cosa qe disfrutarlo.
Ahora ya aquí, recogiendo esos pedacitos con nostalgia e intentando recomponer(me), me doy cuenta qe tengo cientos de miles de palabras qe ofrecer, y no puedo pasar sin dar(os) las gracias por superar mis (inmensas) expectativas. Ana, a tí por ser mi compañera de viaje, en todos los sentidos, cómplice de miradas y momentos, malos, buenos, mejores y...cómo decirlo? maravillosos, gracias porque sin tí no habría Málaga, para mí eres Málaga; Gemma, la caracola qe no qiere salir del caparazón aunqe al final hiciera sol, eres indispensable aqí o allí y lo sabes, gracias por venir una vez más a compartir sueños; Bea, el gran descubrimiento en Málaga, lo mejor qe me llevo a casa de tu ciudad eres tú ; Cris, ya nunca podré mirarte sin recordar estos días juntas, los de antes y los de después, han sido grandes, muy grandes. Me faltan palabras, me sobra ilusión, vamos a dosificarla, una vez más, como cuando hace meses en este Circunloqio descuidado dije a modo premonitorio "ay ay ay la qe se nos viene encima"... y así fue.
14 abril 2009
Verán, hace siglos qe no veo SyG, yo, qe amenizaba las sobremesas familiares sabiéndomelas todas (sí, soy la más lista y pedante de la familia), no saben lo qe echo de menos sus "a qien dirige la pregunta?"...
Al caso, hace unos días encontré este artículo en el periódico qe, no podía ser de otra forma, me ha dejado profundamente preocupada (y de paso ha sido el artículo con el qe más he llorado de la risa)
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/07/television/1239105615.html
Desde aqí (desierto de la blogosfera) hago un llamamiento a Jordi Hurtado, el Benjamin Button español, para qe haga acto de presencia en alguna gala de TVE, qe conceda una entrevista, que su mujer le deje por Antonio tejado y vaya a DEC a contarlo, lo qe sea! pero qe de alguna pista pronto o llamo a chivarme a Juanjo Cardenal.
Al caso, hace unos días encontré este artículo en el periódico qe, no podía ser de otra forma, me ha dejado profundamente preocupada (y de paso ha sido el artículo con el qe más he llorado de la risa)
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/07/television/1239105615.html
Desde aqí (desierto de la blogosfera) hago un llamamiento a Jordi Hurtado, el Benjamin Button español, para qe haga acto de presencia en alguna gala de TVE, qe conceda una entrevista, que su mujer le deje por Antonio tejado y vaya a DEC a contarlo, lo qe sea! pero qe de alguna pista pronto o llamo a chivarme a Juanjo Cardenal.
08 abril 2009
07 abril 2009
'La gente se mira, se sigue el rastro, una sonrisa y después dale a la charla inútil. Quién eres, dónde estuviste ayer, qué local han abierto hoy, qué planes tienes para esta noche, qué haces mañana y cuánto dinero tienes. En definitiva, si vale o no la pena follarte.'
Ayer y contra todo pronóstico comencé el fenómeno Moccia , por el segundo libro. Diez ejemplares de Tre metri sopra il cielo en mi biblioteca y ni uno para mí. Genial. Empiezo por el segundo la trilogía, Ho voglia di te, Tengo ganas de ti se llama. Curioso, me recordó a lo qe leía a los qince pero con aires de veinte. Bastante recomendable. A ver lo qe tardan en sacar una película qe robe la magia.
*Edito: acabo de ver qe ya existe la película, lo qe yo te diga, qe tengo madera para esto.
Ayer y contra todo pronóstico comencé el fenómeno Moccia , por el segundo libro. Diez ejemplares de Tre metri sopra il cielo en mi biblioteca y ni uno para mí. Genial. Empiezo por el segundo la trilogía, Ho voglia di te, Tengo ganas de ti se llama. Curioso, me recordó a lo qe leía a los qince pero con aires de veinte. Bastante recomendable. A ver lo qe tardan en sacar una película qe robe la magia.
*Edito: acabo de ver qe ya existe la película, lo qe yo te diga, qe tengo madera para esto.
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04 abril 2009
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